Es una infección de la parte interna de los ojos debida a un parásito llamado toxoplasma gondii. Es la causa más común de uveítis. La uveítis es una inflamación de la úvea, que suministra sangre al iris y la retina.
Alrededor de 500 millones de personas están infectadas con este parásito. Puede ser congénita o adquirida a lo largo de la vida. La toxoplasmosis puede causar pérdida de la visión y, en algunos casos, incluso ceguera. Se puede adquirir por contacto con gatos desparasitados, verduras o frutas sin lavar y/o carnes mal cocinadas. Cabe mencionar que hay personas que son inmunes al parásito porque tienen los anticuerpos para combatirlo. El parásito se encuentra en las heces de los gatos y en la carne poco cocida de animales infectados, como aves, corderos y reses. El toxoplasma también se puede encontrar en suelos contaminados, donde puede infectar y multiplicarse en pequeños roedores, que luego son devorados por los gatos.
La toxoplasmosis ocular es una infección cuyo diagnóstico se basa en los hallazgos oculares y se confirma mediante análisis de sangre.
Sintomas:
- Visión borrosa
- Dolor de ojo
- Sensibilidad a la luz
- Síntomas parecidos a los de la gripe, como fiebre, dolores musculares y dolor de cabeza
- Fatiga
- Ganglios linfáticos inflamados
- Erupción
- Conjuntivitis (ojos rojos e inflamados)
- En casos severos, pueden ocurrir fuertes dolores de cabeza, confusión y convulsiones.
Factores de riesgo
Algunas personas tienen un mayor riesgo de contraer toxoplasmosis.
- Manipular o consumir carne cruda o poco cocida
- Limpieza de cajas de arena para gatos
- Comer frutas y verduras contaminadas mala higiene de manos
- Trabajar con tierra o con animales infectados
- Tener un sistema inmunológico débil
Tratamiento
Su tratamiento se basa en el uso de antibióticos y corticoides durante al menos un mes y dependiendo de la gravedad de la infección.
En casos avanzados, el pronóstico visual es reservado debido a la localización del daño producido por el parásito en la retina. La retina del ojo es un sitio primario de infección con este microorganismo, por lo que la manifestación ocular más común de la toxoplasmosis es la coriorretinitis.
Prevención
Para reducir el riesgo de contraer toxoplasmosis, siga estas medidas preventivas:
- Cocine la carne a una temperatura segura. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan cocinar la carne a una temperatura interna de 165 °F (74 °C) para matar cualquier parásito Toxoplasma.
- Lávese bien las manos después de manipular carne cruda o trabajar en la tierra.
- Use guantes cuando manipule cajas de arena para gatos o tierra.
- Lave bien las frutas y verduras antes de comerlas.
- Evite comer carne poco cocida o cruda.
La toxoplasmosis es tratable pero no curable, lo que significa que el parásito puede reactivarse y continuar causando daño en el interior del ojo. Un desencadenante es el estrés y la ansiedad.
Toxoplasmosis y Embarazo
Los efectos de la toxoplasmosis en un feto son graves. La toxoplasmosis es una infección parasitaria que puede afectar tanto a la madre como al feto si la madre la contrae durante el embarazo.
Las mujeres deben tomar las mismas precauciones contra la toxoplasmosis que contra cualquier otra enfermedad. Las mujeres que están embarazadas tampoco deben limpiar las cajas de arena para gatos ni manipular la arena para gatos. Se recomienda usar guantes y lavarse bien las manos después de limpiar la caja de arena.
Acude al menos una vez al año a tu oftalmólogo de confianza para que te realice un examen completo de la vista.